Martinete común
Es una garza rechoncha y de tamaño medio (entre 60 y 65 cm). Es notable la escasa longitud de su cuello, si lo comparamos con el de otras garzas, como la garza real o la garceta común. Se caracteriza por sus ojos de color rojo intenso. El plumaje de las partes inferiores es principalmente blanquecino grisáceo. El cuello puede ser blanco o gris claro. El rostro, garganta y vientre son de color blanco puro. El píleo, nuca y espalda son de color negruzco, aunque de tonalidad cambiante, y las alas son de color gris. A los adultos les salen de la nuca dos o tres plumas blancas largas y estrechas, algo más largas en el macho que en la hembra.
Las patas y pies son de color amarillo pálido (algo más intenso en época de cría). El pico, robusto pero no excesivamente largo, es verdoso en la base y negro en la parte superior.
Los juveniles muestran un plumaje veteado en marrón y blanco, así como ojos de color miel o amarillos. No presentan las plumas de la nuca hasta el primer año de vida.
Es un ave de costumbres eminentemente crepusculares y nocturnas, aunque en época de cría es posible verla en actividad a la luz del día.
El hábitat de cría de esta ave son los humedales de agua salada, en gran parte del planeta. La subespecie N. n. hoactli anida en toda América, desde Canadá hasta Patagonia. La subespecie nominal, N. n. nycticorax en Europa, Asia y África. Las poblaciones del hemisferio norte son principalmente migratorias. Las poblaciones de Eurasia pasan el invierno en el África tropical y el sur de Asia, y las de América lo hacen en México, el sur de Estados Unidos y en Centroamérica. En cambio, las poblaciones del hemisferio sur son sedentarias.
Se alimenta principalmente de peces, anfibios, pequeños reptiles e insectos. Excepcionalmente puede completar su dieta con algún ratón.
Estas garzas llegan a sus zonas de nidificación en marzo. Los machos comienzan el complejo ritual de selección de pareja antes de la construcción del nido. Una vez establecida la pareja, se construye el nido sobre un árbol o un matorral alto a unos cuatro o cinco metros de altura. El nido es una sencilla estructura de palos, ramas y otros elementos.
La puesta se realiza entre mayo y junio, y consiste en tres o cuatro huevos de un pálido verde azulado. La incubación, en la que se alternan el macho y la hembra, dura unos 20-21 días. Una vez eclosionados los huevos, ambos progenitores alimentan a los pollos, que permanecerán en el nido tres o cuatro semanas, aunque luego volverán a él para dormir.